jueves, 24 de septiembre de 2009

"Preparaciones anatómicas" de Mario Pera


Título: Preparaciones anatómicas.
Género: Poesía.
Autor: Mario Pera.
Editorial: Lustra editores.
Dimensión: 23.5 cms. x 14.3 cms.
Precio: S/. 25.00
Año: 2009
Número de paginas: 55
ISBN: 9786124035029


Muchos iniciantes llegan provistos de ropas, escudos y un sin fin de artilugios para asegurarse una entrada limpia y sin lesiones al mundo de la poesía. Estos nos entregan, las más de las veces, poemas correctos, solventes hasta cierto punto —bonitos como escritos por malos poetas—, no muestran la piel, son pudorosos y preservan las buenas costumbres. La importancia de este tipo de poetas radica en que sin ellos no existirían aquellos otros poetas, los menos, que se salen incluso de ellos mismos para mostrarnos la piel, los músculos, los nervios y la osamenta.

Los poetas de este segundo grupo son los que giran la rueda y miran a Barlovento sin nostalgia. Son estos espíritus libres los que civilizan y toman la imagen del Dios Occiso de Frazer como su única representación posible ya sea en Fenicia, en África, en Grecia o en la Isla de Pascua; puesto que conciben un «territorio» como el espacio que ocupa un cuerpo vivo mediante los afectos de los que es capaz (como diría Guattari). Son desbordantes, excesivos, incontenibles en su intensidad: son un devenir, siempre una Nueva Carne. Una Nueva Carne de la que han dado cuenta Rilke, Rodin, Bataille, Artaud, Bellmer, Ozu, Debussy, Mozart, Bacon, Klee, Nietzsche, Bergson y Foucault entre otros artistas e intelectuales, y a la que Mario Pera apela con sus Preparaciones anatómicas sin miedo ni pudor, asumiendo riesgos como la escritura de poemas de largo aliento, donde el desarrollo del discurso y las complicaciones inherentes que conlleva escribir un texto de estas características está finamente salvado por el equilibrio perfecto entre pasión e inteligencia, oficio finalmente, del que el autor nos da cuenta (notable es la ejecución de «Roma S·P·Q·R·», por ejemplo).

La verdad que trasunta esta la primera poesía de Mario, refulge en la oscuridad de sus versos (con citas suyas o voces de otros) como minerales preciosos en una cueva o mejor aún caverna, y es que el oro no es sacado de los socavones en lingotes, aunque sus poemas cercanos a lo epigramático nos pongan en la posición de tener que contradecirnos con frecuencia y hablar, por lo menos, de que, a veces, podríamos encontrarnos, en la misma caverna, monedas finamente acuñadas como dones o revelaciones.

(escrito por Víctor Ruiz Velazco)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 

Lustra editores ©2005-2009 (Webmaster y Webeditor) | Crédito: Lustra editores © Copyright | Licencia de publicación de la información contenida en este blog revisar: Creative Commons.